Monday, May 30, 2011

CRIMEN EN LOS MUELLES- ELIA KAZAN VII







La tormenta política y mediática en la que se había visto envuelto el director anatolio-americano se había cobrado todos los cheques. Para gusto de unos y disgusto de otros Elia Kazan volvía a la carga inflando pecho y dispuesto a dar la cara.

Justo en esta tesitura entra un nuevo personaje en la trayectoria fílmica del director: el escritor Bud Schulberg. Este hombre era hijo del legendario B.P. Schulberg, quien había formado parte de la mayoría de los proyectos de los pioneros de Hollywood. Schulberg Jr. había mamado igualmente las raices del espectáculo visual en su niñez, y al igual que Kazan había pertenecido al PC Americano. En 1937 había publicado una historia corta para la revista "Liberty" titulada "What makes Sammy Run?". El escritor decidió hacer de aquel relato una novela larga, pero el Partido criticó su actitud individualista y le aconsejó que reconsiderara el proyecto. Naturalmente Schulberg mandó al Partido y a todos los dirigentes a paseo y se dedicó a escribir, que era lo que le gustaba.

Por su parte Kazan, tras rodar en Baviera "Fugitivos del terror rojo" regresó a Nueva York dispuesto a dar el do de pecho. "Iba a demostrarle a mis viejos "camaradas" , a esos que me habían atacado con tanta saña, que había una izquierda anticomunista, y que nosotros, y no ellos, éramos los verdaderos progresistas. Había regresado dispuesto a dar batalla".

La cuestión era que Kazan y Schulberg habían tenido conversaciones previas. Este último había adquirido los derechos de una serie titulada "Crime in the Waterfront" de Malcon Johnson, que había sido ganadora del premio Pulitzer. Budd había escrito sobre esa serie un guión, que Kazan había leído con entusiasmo.
Escritor y director se desplazaron al otro lado del río para visitar los muelles.Budd se había comprometido tanto con la historia que había estado viviendo en Hoboken, haciéndose amigo de los cargadores del puerto y emborrachándose con ellos en sus propios baretos. Había podido enterarse de las luchas internas del corrupto sindicato de estibadores, incluso había arriesgado su propia vida. Kazan no tuvo la menor duda de que aquel material era pura dinamita fílmica y tuvo la completa certeza de que haría aquella película por encima de todo.

La primera medida que tomó Kazan fue pasar página con el pasado. Soltó amarras con Darryl, con la Fox y con su controvertida imagen política. El y Bud Schulberg convencieron a Sam Spiegel para producir "La ley del silencio". El productor supo dar en el clavo.

Creo que la mayoría, por no decir todos, los que me leeis sabeis de sobra la historia que cuenta "On the Waterfront".

Los muelles de Nueva York están infectados de miedos y violencias. Terry Malloy (Marlon Brando) es obligado por los mafiosos a traicionar a su amigo Joey Doyle, quien es arrojado al vacío desde una azotea.
Terry no esperaba ese desenlace, pensaba que Joey fuera sacudido, pero no asesinado. Todo el mundo en los muelles sabe quien perpetra estas acciones pero nadie habla porque están agarrotados por el miedo.
El cura de la parroquia, el padre Barry (Karl Malden) consuela a Eddie (Eva Marie Saints) la hermana de Joey, pero ésta le recrimina que siendo sacerdote no denuncie los crímenes que se hacen con la mayor impunidad y que no se involucre en los problemas portuarios.
El jefe de la mafia en los muelles es Johnny Friendly (Lee J.Cobb) y Charlie (Rod Steiger), el hermano de Terry , que es el brazo derecho del jefe.
Naturalmente Terry se gana el beneplácito de Johnny y media para que el muchacho consiga un trabajo cómodo. Pero la policía sabe que Terry ha sido testigo del crimen de Joey y es llamado a declarar. Naturalmente el chico se niega.
La recriminaciones de Eddie al padre Barry no han caído en saco roto. El sacerdote toma contacto con un grupo de hombre que están hartos de los sucios tejemanejes de Johnny. Todos ellos se reunen en la parroquia, donde Terry es enviado en calidad de espía. El enfrentamiento es inevitable y se arma la bronca.
Terry ayuda a Eddie a salir de la iglesia por una escalera de incendios y le invita a un paseo. Ella desconoce el vínculo del chico con Johnny y le habla de sus estudios en un colegio de monjas y de su deseo de ser maestra.
Cuando la chica vuelve a su casa su padre Pop, le dice quién es en realidad Terry, pero aun así ella se siente atraída por él. Ambos se citan en un bar donde ella le pide a Terry que le ayude a esclarecer la muerte de su hermano. Terry, que se siente responsable apenas puede ocultar sus remordimientos, pero por otra parte sabe lo mucho que él y su hermano le deben a Johnny.

Naturalmente el hampón ve flaquear la voluntad del muchacho y como castigo por las supuestas infidelidades le quita el puesto que tenía en el almacén y lo pone a descargar en las bodegas.

Para impedir que uno de los estibadores hable con la Comisión los sicarios de Johnny preparan un supuesto accidente contra Duncan. El obrero muere y el padre Berry aprovecha para lanzar una filípica contra los que manipulan y siembran la violencia en los muelles.

Terry, cada vez más enamorado de Eddie le confiesa su participación en el crimen de su hermano. Ella no puede creer lo que el chico le dice y huye desesperada. Finalmente los sentimientos se imponen entre ambos jóvenes y tras diversos sucesos violentos Terry Malloy declara en juicio abierto contra los asesinos de Joey Doyle, que actuaron bajo las órdenes de l jefe Johnny.
Esta confesión es una sentencia para Terry que recibe una gran paliza por su delación. Al final el silencio cobarde se quiebra y Johnny ya no podrá imponer su ley. Un Terry ensangrentado y tambaleante se dirije hacia el almacén seguido de todos los trabajadores.

A nadie se le escapa que "On the Waterfront" fue una respuesta retadora a "Hook", guión firmado por Arthur Miller, que en principio era el proyecto que director y autor teatral iban a llevar a cabo. La jugada le salió redonda a Kazan y limpiamente, porque al día de hoy esta película sigue marcando uno de los baremos artísticos más altos del director. Podemos decir que se despachó a gusto a pesar de que sus relaciones con el productor Sam Spiegel no fueron demasiado fáciles.

Spiegel le comunicó que el papel principal iba a ser para Frank Sinatra. A Kazan le pareció de perlas. El italoamericano encajaba perfectamente en el papel. Frank había crecido en el Hoboken y hablaba la jerga de la zona a la perfección.
Pero cuando prácticamente todo estaba decidido Sam abordó al director y le preguntó a bocajarro qué le parecería si el papel se lo adjudicaba a Marlon Brando. Kazan se opuso ya que todo estaba hablado y pràcticamente ultimado. El productor, como si no le hubiese escuchado siguió hablando. Le dijo que Marlon le había comentado que no quería trabajar en ninguna película suya por la delación ante el Comité. Kazan se enfadó y le dijo a Spiegel que de ninguna manera Brando se iba a quedar con el papel de Terry.
Naturalmente Spiegel no hizo caso del comentario de Kazan. El astuto productor sabía lo que hacía. Si Frank encabezaba cartel ganaría el doble menos que si lo encabezaba Brando. Este era una estrella y Sinatra aun no tenía suficiente caché.
Hoy ni nos podemos preguntar cómo hubiera sido Frank Sinatra en el papel de Terry Malloy, pero el oscar que Brando consiguió parece demostrar que Spiegel no anduvo descaminado en reconciliar al director con el actor, o al menos para esa película, porque Brando y Kazan no volvieron a colaborar en otra película.

"Nuestro primer día de trabajo se desarrolló en unos tejados desde donde la cámara podía abarcar la ladera que descendía hasta la ciudad de Hoboken y el río Hudson y, en la otra orilla, Nueva York. Había niebla, y aunque se veían los contornos de la ciudad en el horizonte, era una visión gris, fría y vaga. Estaba muy decepcionado. Pero lo que aquella mañana parecía ser una desgracia terminó siendo una suerte; a lo largo de toda la película se ve el famoso contorno de Nueva York gris y vagamente perfilado- justo al revés de la imagen que nos dan las postales. Así se creaba la atmósfera adecuada para la película."
El rodaje fue difícil. Los exteriores eran reales y todos se quejaban del frío intenso. Ese rigor ambiental surtía un efecto más que real en las caras de los intérpretes dándoles el aspecto de las gentes del lugar. Brando era el más rácano. El director cuenta que en una ocasión tuvo que sacarlo prácticamente a rastras del Grand Hotel (Grande sólo de nombre. Hoy no existe dicho hotel) donde se alojaban los técnicos y artistas del film.


Cuando se terminó la película hubo dos proyecciones privadas muy significativas. En la primera de ellas se proyectó el montaje provisional para que Leonard Bernstein, el futuro autor de "West Side Story", pudiera hacerse una idea para componer la banda sonora. A dicha proyección asistía igualmente Marlon Brando, quien se sentó junto a Kazan. Cuando la palabra fin apareció en pantalla, Marlon Brando se levantó. No miró a la cara ni le dirigió palabra alguna a Kazan. No volvieron a trabajar juntos. No dispongo de documento alguno en el que Marlon diga algo al respecto de este desencuentro final entre estrella y director.

La siguiente proyección fue un mero trámite. Había que mostrar el producto a Harry Cohn, de la Columbia, que sería la encargada de distribuir la película. El ejecutivo preguntó al principio de la proyección cuánto había costado. Kazan le contestó que novecientos mil dólares. Harry asintió y todos se acomodaron en los sillones de la sala. Junto a Cohn había una linda muchacha. A mediados del metraje se oyeron unos ronquidos eran los de Cohn que por lo visto horas antes había andado de juerga con la chica y algunas starlettes. Cuando acabó la proyección Cohn dije que OK y la chica que se sentaba a su lado dijo que le había fascinado, sobre todo el protagonista.

"On the Waterfront" se estrenó en el Astor Theatre (en la foto superior, años antes) una mañana de Abril de 1954. Horas antes de la proyección se formó una inmensa cola de gente. Fueron los primeros indicios de un éxito cantado que alcanzaría sus cotas más alta la noche de los oscar en la que consiguió ocho oscars, incluída mejor película, y mejor director.

Kazan confiesa que en aquella ocasión supo saborear con gusto una venganza, y lo dice sin tapujo alguno : "Revolviendo viejos periódicos he encontrado una página con nuestras fotografias en el momento de recibir los honores por la película. Mi expresión es distinta de la de todos los demás. No es halagüeña. No me hace enorgullecerme. Pero debe comprenderse que esa noche estaba saboreando y disfrutando mi venganza. "La ley del silencio" era mi propia historia; con mi trabajo en esa película le estaba diciendo al mundo cuál era mi postura , y a los que me criticaban, que se fueran al infierno. Por lo que se refería a Art Miller, la película también era un mensaje para él tanto como para John Wharton. Con el tiempo llegaría a perdonarles- pero no ese año"





34 comments:

David said...

"incluso había arriesgado su propia vida". Eso según Elia, ¿no?
A mí esta peli me gusta mucho. Y creo que ha envejecido menos de lo que a veces dicen algunos por ahí.
No sé si todo el mundo sabía lo de Hook de Miller... yo porque leí sus memorias hace años, pero no es una historia tan conocida. Miller se estuvo documentando pero bien con el tema...todo empezó por unos graffitis que veía por ahí que decían Dónde está Peter...no recuerdo el apellido.
Uno de los que se habían cargado las mafias sindicales, vamos.
Arthur no quiso currar con Elia por aquel entonces. No sé qué tal hubiera sido el guión de Miller (no lo he leído), pero esta historia está muy bien.
De todas formas, Miller pudo reutilizar el material que había acumulado en Panorama desde el puente (que está bien... no he visto la peli que hiciero, sólo he leído la obra de teatro).
De todas formas, a mí me parece que no es lo mismo la delación de Elia, que la confesión del personaje de Marlon.
A medida que voy leyendo tus entradas sobre Elia me voy quedando con una impresión parecida a la que tengo sobre otro grande como Ford.
Qué buenos directores... menos mal que no tuve que conocerlos, ni vivir con ellos (porque vamos, ese rollo de la "venganza" final me parece muy mezquino).
Buena entrada.
Saludito.

abril en paris said...

A mi la pelicula me parece de lo mejorcito. Los méritos de Kazan como director son indiscutibles. Y opino como David cuanto más lees sobre los directores que admiramos más se nos caen del pedestal como PERSONAS. Pero vamos tendrá que ser asi..los idealismos no parecen ser muy prácticos...
Pero no sufras que ésta vez no voy a polemizar..;-P

Estupenda entrada Antonio.:-)

Un abrazo

Manuel Márquez said...

Ví la peli por primera vez, compa Antonio, hace no mucho tiempo, y me pareció, de verdad, impresionante: una historia tensa e intensa, y muy bien narrada. Desde ese punto de vista, no creo que haya gran cosa que cuestionarle u objetarle a Kazan. Sobre otras cuestiones, en fin, creo que son harina de otro costal, bien diferente: no creo que su delación pueda ser justificada ni exculpada, y constituye un baldón, un punto negro en su biografía que, sin invalidarla en su globalidad, sí que la marca y condiciona de manera muy fuerte. O, al menos, así me lo parece a mí...

Un fuerte abrazo y buena semana.

Javier Simpson said...

Una gran peli.
La escena de la paliza a Brando es bestial, tanto como otra que le meten en la de Arthur Penn, La jauría humana.
Desconocía que el papel se lo hubiesen ofrecido antes a Sinatra. El cambio, creo, fue para mejor porque para mí Brando es mucho mejor actor.
Finalmente comentarte, ANRO, que no es lo mismo un delación como la que nos cuenta en La ley del silencio, en la cual se chivaba de mafiosos, que delatar a comunistas; después de todo, éstos no habían matado a nadie (que yo sepa) y tenían una ideas políticas, aunque fuesen muy revolucionarias, que no creo que fuesen un riesgo para el sistema, y menos en un país como los Estados Unidos.
Un salutti, y muy buena la entrada. Ciao, ANRO.

pepa mas gisbert said...

Son innumerables las películas de Brando, y casi todas recordadas, pero si pienso en Marlon Brando, lo primero que me viene a la cabeza, lo que asocio con él, es esa Ley del silencio, en blanco y negro, una terraza en lo alto de un edifico y no se porqué, lluvia. Eso es Brando, recuerdos de cine.

Siento no poder pasar por tu casa todo lo que quisiera, motivos diversos me impiden bloguear mucho, pero ten por seguro que no quiero perderme tus historias, de hecho, no me las pierdo.

Pepe del Montgó said...

Hace mucho tiempo que vengo viendo esta película, he perdido la cuenta de las veces que la he visionado, y cada vez descubro algo nuevo en el guión, en el montaje, en la interpretación... pero siempre acabo pensando que sólo un buen director era capaz de llavar a cabo esta magna obra. Me encantan las anécdotas que desconocía.

Josep said...

Tú ya sabes, Antonio, que a mí la vida personal, lo muy hideputa que pueda llegar a ser un artista me importa un bledo, porque me interesa únicamente su obra artística que me gustará o no sin tener en cuenta la vida privada.

Esta película es con toda seguridad la que más me gusta de Kazan (que tampoco es que las haya visto todas) y tan solo puedo añadir que seguramente Sinatra hubiera bordado el papel. La tengo que repasar un día en versión original, porque siempre la he visto doblada (muy bien, por cierto) y ya va siendo hora de darle una pequeña oportunidad a Marlon para redimirse mientras disfruto con esos secundarios de verdadero lujo...

Un abrazo.

Marcos Callau said...

Tremenda película Antonio y excelente reparto (me encantan Lee J. Cobb y Karl Malden) No conocía toda esa historia y me ha gustado mucho la anécdota de Hoboken y el puerto. Un abrazote, majo.

J.A. Pérez said...

No me imagino esta película con Sinatra de protagonista. Brando está inmenso... al igual que todos los demás. Al margen de lo que se pueda decir de Kazan, 'La ley del silencio' es una OBRA DE ARTE (así, con mayúsculas) que hay que revisitar de vez en cuando. Es cine del que ya no se hace... y eso sí que es una pena.

Fernando R. Genovés said...

"La ley del silencio" es una película rodada en estado de gracia. Lamentablemente, se ha perdido mucho tiempo analizándola como respuesta o venganza personal o redención de Kazan, y cosas así, por parte de quienes ven en el "medio" (artístico o de comunicación) cualquier ocasión para soltar el "mensaje"... Sea a cuento de McCarthy o de McLuhan. Y lo que interesa de un filme es su resultado y factura, su valor artístico.

En este caso: una obra maestra y un éxito colosal, que a casi nadie disgusta. Pocas veces se ha visto en una cinta tamaña concentración de talento e inspiración, de realismo y romanticismo, de épica y lírica, de "sense and sensibility", reunidos en armonía universal. Bueno, sí, John Ford, sólo Ford, realizaba el milagro como si tal cosa, película tras película.

Estupenda reseña, Anro, muy documentada y serena. Juiciosa y emotiva.

Salucines

ANRO said...

Of course es un poco de exageración por parte de Elia...yo no creo en absoluto que nadie quisiese cargarselo o al menos físicamente, ja, ja, ja,
Efectivamente, al margen de consideradciones políticas, la peli es extraordinaria...y si me apuras hoy sería extrapolable a algunos lugares de nuestra España, y no señalo con el dedo.
Me interesa la biografía de Miller pero compruebo que no hay nada de eso en el mercado español. En cuanto al anglosajón tengo tres opciones: Dos de Christopher Bigsby y otra titulada "The Life and Work" firmada por Martin Gottfried...sácame de dudas.

No se puede especular con "Hook", pero como bien dices el guión de Schulberg está requetebién.

No, en absoluto. Ambas delaciones son distintas, hay que reconocerlo, y lo de la venganza se sirve en frío es acojonante. Pero, tambien hay que comprender al hombre. De todos los delatores a él fue a quien más caña se le dió..¿envidias profesionales?....pero sí, como tú dices es mezquino, pero al menos lo confiesa.
Un abrazote.

ANRO said...

Que nó, Abril, aunque no lo creas me gustan mucho las polémicas.
Mi postura hacia Kazan parece benevolente, pero no lo es tanto. Lo que ocurre que cuando unoo mira las cosas desde una perspectiva menos apasionada, se comprenden mejor las reacciones humanas.
Es una putada muy grande, que por ciertos elementos de tu pasado, tus ilusiones y trabajos presentes se caigan estrepitosamente.
Supongo que Kazan sopesó los pros y los contras, y actuó en consecuencia. Yo no me suelo fiar de los muy decentes ni de los muy cobardes...el ser humano puede creerse el rey del universo y no ser nada o al contrario.
Si estuviéramos hablando en torno a una mesa y con unas birras te contaría muchos casos en los que me he visto envuelto a lo largo de mi vida laboral y profesional y de lo complejo que es a veces tomar una decisión.
Polemiza, polemiza, amiga Abril.
Un abrazote.

ANRO said...

Desgraciadamente, amigo Manolo, ese baldón llegó a pesar hasta el día de la ceremonia de concesión del óscar honorífico. Parte de los invitados al acto permanecieron sentados en sus asientos y no aplaudieron, entre ellos el actor Nick Nolte, que en realidad era un chiquillo cuando ocurrieron los sucesos del Comité.
Por otra parte, creo que todos estamos de acuerdo en la calidad y la maestría de Kazan en la dirección de películas...eso nadie se lo puede discutir.
Un abrazote.

ANRO said...

Hay disparidad de opiniones, amigo Javi, en cuanto a la opción de Sinatra para interpretar el papel de Terry Malloy....yo también me decanto por Marlon, entre otras cosas porque en aquellas fechas Sinatra ya era un tanto mayorcito, 39 años, y Terry se supone que es un muchacho joven.
Naturalmente, como le digo al amigo David, es muy diferente la delación que se narra en esta peli y la delacción del director ante el Comite de Actividades...en ese asunto siempre habrá polémica y probablemente Kazan siempre llevará colgado ese "sanbenito"...
Un abrazote.

ANRO said...

Excusada quedas, amiga Alma, faltaría más, en realidad llega un momento en el que aunque quieras leer a todos los amigos, es materialmente imposible. Yo mismo me encuentro ahora absolutamente a tope.
Me alegro, como no te puedes imaginar, que te detengas de vez en cuando en mi casa, ójala pudiera ofrecerte una birra y departir tranquilamente unas horas.
Un abrazote.

ANRO said...

Amigo Pepe, me ocurre igual. He visto esta peli en infinidad de ocasiones y siempre encuentro nuevos matices. Fue una idea genial rodarla en blanco y negro. La fotografía capta perfectamente la turbiedad de la trama.
Un abrazote.

ANRO said...

Ya sé que no es el caso tuyo, amibo Josep, pero en muchas ocasiones se tiende a minimizar la labor artística debido a un pasado más o menos turbio.
En V.O. es todo un placer, lo que ocurre que se necesitan los substítulos porque el inglés cerrado de los personajes es muy difícil de captar.
Yo opino que el idioma original es esencial para poder captar todos los matices de un personaje.
Hay tres pelis que no se cual de ellas poner en primer lugar, bien ésta, o "Al este del Edén" o por supuesto "Un Tranvía...
No seas tan duro con el pobre Marlon...ha hecho cosas bastante buenas y otras que ni debería haber aceptado.
Un abrazote.

ANRO said...

Esa es la idea, amigo Marcos, entre amigos hay que repartir información. Desde luego el plantel de secundarios en esta peli es todo un lujo.
Un abrazote.

ANRO said...

Yo le digo a otro amigo, J.A., que Sinatra era demasiado mayor para el papel...Marlon está inmenso en su interpretación de Terry. No, no se puede uno imaginar a otro actor.
Desde luego te puedo asegurar que se hace muy poquito cine con mayúsculas.Y eso es una verdadera pena y todos los cinéfilos los lamentamos.
Un abrazote.

ANRO said...

Creo, amigo Fernando, que conforme pasa el tiempo se tiende a despojar esta peli de su posible contenido político.
Raro es el crítico o el cinéfilo que no la pone entre los mejorcito de su videotéca.
Efectivamente fue rodada en estado de gracia y se juntaron muchísimos factores para que el producto fuera redondo.
Hoy, los ejecutivos de los estudios la hubieran rechazado de plano...¡tiempos oscuros para las salas oscuras!
Un abrazote.

David said...

Si casi me das la razón en todo... Vaya!
Biografías no sé. Yo leí su autobiografía, A vueltas con el tiempo (en la que no mencionaba nada de su hijo, así que, si la coges, hazlo "con reservas"). Estaba muy bien escrita y era amena. Aunque lo cierto es que él se ponía demasiad bien a si mismo, la verdad (ja,ja).
Un abrazo.

ANRO said...

Estoy leyendo, DAvid, que el tocho de Bigsby es a la vez biografía y autobiografía del escritor, así que creo que al menos es parte de la que tú leíste. Probablemente Bigsby haya completado las memorias.
Estoy volviendo a leer un libro, que sé te gustó mucho. "Un árbol es un árbol". Yo lo había leído en inglés hace tiempo, pero no lo había captado del todo, el otro día lo encontré traducido y lo compré. La verdad es que el tío era un fenómeno.
Un abrazote.

V said...

Me traes recuerdos inolvidables Anro, ya que esta era sin duda la película favorita de mi padre, el cual trabajó en un muelle durante toda su vida. Recuerdo como le emocionaba particularmente verla. Reconocía el ambiente, la humedad, el sudor del trabajo, y lo duro que es trabajar con un jefe. Por lo demás, es una historia magnífica, como magnífica es tu labor sobre el cine de este fenomenal director. Un saludo

ethan said...

Como dicen muchos comentaristas habría que abstraerse del politiqueo, de la venganza personal, de la justificación de una delación, etc, etc, etc. Todo eso no hace más que perjudicar a un peliculón como este.
Soy de la opinión de que las películas una vez terminadas y aprobadas por el paso del tiempo ya no pertenecen a nadie (lo siento sr. Kazan); nos pertenecen a todos. En ese sentido la película es una obra de arte con interpretaciones legendarias. Para verla una y otra vez. Con una historia de amor con mayúsculas.
Muy buen artículo, amigo.
Un abrazo!

abril en paris said...

Me ha gustado éste último comentario de ETHAN. Creo que ha dado en el clavo. Abstraerse...Mirar sin prejuicios una obra y valorarla en si misma. Si uno la entiende y le conmueve pues ¡ yá está!
Me ocurre con la pintura con la literatura.. Prefiero ignorar ciertas biografias para no perder la mágia que me trasmiten ciertas obras de arte que admiro y que "adopto".

Eso no impide conocer ciertos hecho historicos y asumir que están ahí tambien..
Éstas entradas tuyas nos provocan en el mejor sentido de la palabra, Antonio.
Un besote.:-)

ANRO said...

Pues cuánto que me alegro amigo V. Tu padre debió de vivir cosas bastante duras en ese ambiente de los muelles. Esta peli debió de ser impresionante para él.
En ocasiones me cuestiono la utilidad de los blogs, pero ya veo que en algún sentido es bueno tomarse este trabajo con la ilusión de que emociona a alguien. Muchas gracias, amigo.
Y un abrazote.

ANRO said...

Dices muy requetebién amigo Ethan, las películas pertenecen al colectivo humano, sobre todo éstas que son puntales.
Me alegro haber abordado esta serie sobre este director. Creo, que dentro de mis límites, he tratado de resaltar sus facetas como persona, con sus luces y sombras, y por otro su poderoso lado artístico.
Prácticamente la totalidad de los amigos coinciden en lo mismo.
Un abrazote.

ANRO said...

Tambien yo estoy de acuerdo amiga Abril.
A partir de ahora, en los próximos capítulos va a primar el artista sobre la persona, pero para llegar a este punto, en el que se gestó "On the Waterfront" había que incidir en el aspecto humano y en las circunstancias que llevaron a Kazan a filmar esta obra maestra.
Habría que hacerse una pregunta. ¿Hubiera filmado Kazan esta película de no mediar el asunto del Comité?.....
Esta pregunta bien pudiera darme una idea sobre una serie de relatos en los que se especulara ¿Y si no.....?
En fin, todo se andará.
Un abrazote.

William De Baskerville said...

Buenas tardes, AnRo.

on The W. es una de las favoritas de mi Padre y la primera vez la vi con El, me gustó , a partir de ahi vi todas las de Marlon Brando (vamos, que me enamoré)
Aunque nunca supe la historia real que precedia a esta gran pelicula.
La fotografía me pareció estupenda, y el reparto en general(aunque cuando la vi no entendía mucho de nada).
Recuerdo que hasta me dolió la paliza que le dieron a Brando(si, yo soy demasiado receptivo, :D).

Que intrigante el desencuentro de Actor-Director ¿Que pasaria?.

Una pena porque los trabajos que hicieron juntos (para mi) fueron maravillosos.

Y alguna más de kazan han estado en mis favoritas mucho tiempo.(cada vez que digo algo asi, mas me acuerdo del meme, jajajaj).

Me ha parecido muy interesante, ya que datos tan especificos yo personalmente no conocía.

Como el primer cartel que has puesto, me gusta mucho tambien.

Abrazotes!.

Pd: La verdad que P.A. no gusta a mucha gente, es de esos directores que o te encanta o no, aunque algunas personas me han dicho alguna vez; No me gusta este director, pero esta o cual pelicula si (pero los menos)
A mi , Abrazos me gustó muchisimo, la primera vez me quedé un poco bloqueado, porque esperaba ese estreno desde meses y no me quedé con todo detalle como a mi me gusta, pero, meses despues cuando la vi por segunda, me maravilló, le saque mas jugo en la actualidad ya voy por la cuarta... ;).

Me ocurre igual con La piel, estoy esperando pacientemente (miento) el estreno.

Otro Abrazote!.

FATHER_CAPRIO said...

Probablemente con Sinatra la película hubiese sido también excelente, claro que con actores de la talla de Lee J. Cobb, Rod Steiger, Eve Marie Saint o Karl Malden, así ya se puede...

¿Kazan? Cinematográficamente un genio. En otro orden de cosas, carezco de elementos y además no soy juez.

¡Por sus obras los conoceréis! Pues eso. Igual que conozco a un tal Anro por sus obras y me parece un buen tipo excepcionalmente bien informado.

Abrazotes

Sandra Mantas said...

Yo creo que para nada hubiese sido igual con Sinatra. Brando le otorga a sus personajes un plus inexplicable que en esta película vemos. Brutal la foto del cine. Buen trabajo ANRO. Un abrazo.

ANRO said...

Qué me alegro amigo William de compartir algo que ha emocionado a alguien tanto como a mí. Otro amigo también me ha citado que su padre trabajó como estibador y lo mucho que le gustaba esta peli.
El desencuentro entre Brando y Kazan fue otra derivación política. Kazan había denunciado a la Strasberg y Brando había mamado el Actors Studio.

P.A. es un gran director, lo que ocurre que sus guiones no acaban de gustarme por su tendencia a lo exagerado. "Volver" me pareció magnífica y "Besos robados" tenía momentos excelentes, pero....habría que discutir este tema largo y tendido amigo y seguro que llegaríamos a un punto medio.
Un abrazote.

ANRO said...

Ja, ja, ja, amigo Father...que nó que soy un tipo realmente malo y mi fuente de inspiración es la gran cantidad de libros que afortunadamente he podido mercar.
La única pega que veo con Sinatra es la edad, era un pelín mayor para el papel.
A mí tampoco me gusta juzgar y aquella fue una época muy revuelta.La gente andaba un poco desquiciada.
Un abrazote

ANRO said...

Creo, amigo David, que casi todos coincidimos en la extraordinaria interpretación de Brando y no nos imaginamos a otro en su lugar, aunque fuera Sinatra.
La foto del cine me costó conseguirla, pero al final la localicé.
Un abrazote.