Wednesday, February 24, 2010

EL CORTE DE MANGAS DE CHARLES LAUGHTON

Hoy he tropezado con dos casualidades. Primero visité la casa de la amiga Gloria "Rooting for Laughton" donde hablaba de las escenas escamoteadas al estupendo actor Charles Laughton en la película "Spartacus" de Stanley Kubrick y otras sabrosas anécdotas. Despues del almuerzo (cuando nuestro amigo Josep dice que yo duermo la siesta, en realidad no es así) leía una biografía de Lubitsch donde se contaba que el fragmento de la película "If I Had a Million" titulado "The Clerk", dirigido por el maestro había sido descolgado de la pelicula. Me sonreí y decidí investigar sobre el asunto. No sé si el aserto es cierto o no, esa cuestión se la dejo a la amiga Gloria, pero sí descubrí el fragmento, que os mostraré al final después de hablaros un poquito de esta desconocida película.

En 1932 la Paramount decide hacer una película de sketchs dirigida por un maestro y seis artesanos del cine americano: Ernst Lubitsch, Norman Taurog, Stephen Robert, Norman Z McLeod, James Cruze, William A. Seiter y H.Bruce Huberstone.
En el guión intervinieron varios escritores pero Joseph L. Mankiewicz hizo la mayor contribución al mismo. Basado en una novela de Robert Andrews la propuesta consistía en que un riquísimo hombre de negocios decide distribuir su fortuna entre ocho personas completamente extrañas, escogidas al azar en una guía telefónica (el primer nombre señalado es el de John D. Rockefeller, que es ràpidamente descartado)
A partir de aquí comienzan los ochos sketchs en los cuales se muestran las reacciones de los diferentes individuos al recibir el inesperado cheque. Por ejemplo el titulado "Violet" cuenta como una prostituta, Violet, contrata la mejor habitación de un hotel....para acostarse sola. Otra de las historias narra cómo un falsificador que ha estado varias veces en prisión entrega el cheque a un encargado de albergue para que le deje dormir una noche y el encargado usa el cheque para encender un cigarrillo. En otro episodio un condenado a la silla eléctrica muere el mismo día que recibe el cheque.
La última historia une al millonario con una de las beneficiarias, Mary Walker, con lo cual acaba todo como un canto a la vida.
Pero la historia contada por Lubitsch e interpretada por Charles Laughton es una pequeña obra maestra, en la que el "toque" de las puertas que se abren y cierran tienen como punto final el impagable "razzberries" de Laughton. Para goce de todos vosotros aquí teneis la escena completa.

22 comments:

David said...

No he visto esta película. Tiene buena pinta. La historia de Violet (que debe ser la chica del cartel) me parece muy buena, y el resto tampoco desmerecen. Pero me parecería fatal que hubieran quitado esta escena, que no sé si lo hicieron. Gloria sabrá, sin duda.
Y apartándome un poco de los preceptos de la iglesia laughtoniana, creo que tal vez hubiera quedado mejor que Charles hubiera vuelto a mirar el "papel" para cerciorarse de su "acción" antes de entrar donde el presidente... Pero ese detalle seguro que lo sugirió Laugthon y Ernst no lo tuvo en cuenta (je,je).

ANRO said...

He andado investigando, David y lo que parece ser es que en algunos paises (?) este skech les debió parecer demasiado subversivo y lo cortaron sin más. Parece que esto es lo verosímil.
En cuanto a la peli en general es tremendamente divertida. En You Tube la puedes ver entera dividida en ocho partes. Comencé a verla y me quedé pegado hasta terminarla. Es francamente buena.
El primer trozo es impagable. Dedícale hora y media porque vale la pena.
Esto de descubrir joyitas cinematográficas es un buen deporte pero hay que dedicarle tiempo.
Un abrazote.

David said...

A ver si saco tiempo. Pero tengo demasiadas cosas acumuladas, Anro. Demasiadas... Y paso demasiado tiempo con esto de los blogs. Un abrazote.

alicia said...

¡Pero si la oficina parece la de El apartamento! Muy bueno el detalle de las puertas y la pedorreta final. Grandísimo Laugthon.

ANRO said...

Exactamente igualita que El Apartamento, Alicia. Wilder fue un aventajado discípùlo y siguió fielmente las enseñanzas de Lubischt.
Esos breves minutos me dejaron absolutamente fascinado. Si puedes ve toda la peli porque vale la pena y está toda en You Tube.
Un abrazote.

pepa mas gisbert said...

Que mucho contado en tan poco tiempo.

Un abrazo

Me estoy entrenando para cuando me pase a mi.

ANRO said...

Ja, ja, no te creo tan materialista Alma, pero un millón de dólares no vendría mal para muchas cosas. Yo creo que le daría muy buen destino a ese dinero.
Un abrazote.

Vivian said...

No conocía la película, pero tu entrada invita a descubrirla, intentaré hacerme con ella y verla en cuanto pueda.

Que buena la escena, muchas gracias por colgarla, grande Lubitsch, y grande Laughton, y como se nota la genialidad de los genios, se puede decir tanto en tan poco tiempo y sin necesidad de palabras…

A más de uno creo que nos hubiera gustado protagonizar esta escena en la vida real en algún momento de nuestra historia laboral.

Lo dicho, gracias por colgarla, me has alegrado la noche.

Un abrazo muy fuerte

ANRO said...

Es muy fácil verla por You Tube, Vivian. Está en ocho fragmentos y es una verdadera gozada.
Este segmento es genial y como tú bien dices se dice todo sin apenas decir una palabra.
Un buen dinerito de esos y venido del cielo es genial, pero en algunas de las historias de la peli es una desgracia. Así que lo mejor conformarse con lo que tenemos.
Un abrazote y pásate un fin de semana genial.

Josep said...

¡Pero qué mentiroso eres, Antonio!
Si toda la isla sabe de memoria tus hábitos de la siesta por los ronquidos que sueltas... :-)

¡Vaya pedazo de escena! Esto no te lo puedo perdonar, porque ahora me tendré que pasar el fin de semana viendo en youtube la película entera: como se nota que a los jubilatas les sobra el tiempo.... :-)

Creo a pies juntillas lo que dices de la eliminación (espontánea y esporádica) del fragmento por su carácter subversivo: está claro que Lubitsch era un maestro (esa oficina es el embrión del apartamento, sin dudarlo) y su conjunción con Laughton no podía más que darnos una alegría pasado tanto tiempo: con cuatro letreros en las puertas, todo explicado. Hubiera sido, de haberla descubierto yo antes, una magnífica Escena Sin Diálogos....

Un abrazo.

ANRO said...

Sabía que te iba a gustar, Josep, y por eso te perdono que me calumnies con tanta caradura. ¿Cómo crees que hubiera descubierto esa escena si hubiera estado roncando?....Además lo de jubilata es un infundio infame. Si te dijera lo que le estoy pagando a Zapatero para dentro de unos meses ser "milieurista" te daría un soponcio.
Ve la peli completa, tiene momentos realmente buenos, pero el mejor es sin duda esta breve "escena sin palabras".
Gózate el fin de semana, yo voy a estar jodido de trabajo porque tenemos a un trío de albañiles que van a meterle mano a unas chapuzas en la casa y en el sótano de la tienda.
Un abrazote.

Gloria said...

Pues, por suerte, esta escena de Laughton no fue eliminada del montaje original. Tal vez, como sugiere David, fuera censurada aquí y allá (recordemos los "besos robados" de las copias proyectadas en Cinema Paradiso) según la estrechez de miras de autoridades locales, pero nunca eliminada del master, por así decirlo.

Lo que puede haber dado pie a la idea de que la escena fue eliminada es una interpretación -o traducción- errónea de la jugosa historia de las tomas alternativas: Al parecer Lubistch, ante la contundencia de la sonora pedorreta de Charles, le preocupó que la escena no pasara la censura en ciertos paises. Así que Lubistch y Laughton probaron una serie de "saludos" alternativos.

Despues de varias pruebas, y estando actor y director con ánimo sumamente gamberrete, a Laughton no se le ocurrió otra cosa que probar un gesto hecho con dos dedos: un gesto muy parecido al popularizado recientemente por uno de nuestros prohombres con un dedo solo... Charles y Ernst se partieron un rato la caja despues de rodar esta opción (que obviamente, no creían válida para enfrentarse a las tijeras de ningún censor). Para asombro -y regocijo- de ambos la censura inglesa eliminó la pedorreta... ¡Para poner en su lugar el gesto del oficinista con los dedos en "V" ! (y no me refiero, precisamente, a la variante popularizada por Winston Churchill...)

La posdata de esta historia, referida por Elsa Lanchester, sucede unos cuantos años despues, mientras Laughton le explica la historia a un taxista americano: Laughton comenta quue el gesto con un dedo sólo se considera extremadamente grosero en Inglaterra, mientras que el gesto de dos dedos había pasado la censura inglesa, a lo que el taxista replicó "Supongo, señor Laughton, que los ingleses tienen ojetes más grandes"

Opino que la película es muy divertida, y con un reparto de leyenda (la flor y la nata del plantel de la Paramount de entonces). Mis sketches favoritos son (aparte del de Laughton, of course ;p), son el despiporrante episodio de autos- choque con W.C. Fields, el episodio Anti-Lladró de Charlie Ruggles Y Mary Boland (=una de las mejores parejas de comedia del cine. Y punto), y el de la rebelión del hogar de jubilados... Supongo porque, como el episodio del oficinista, permiten que unos personajes obtengan, al menos en la ficción, un poco de justicia.

P.S.: Por cierto Antonio, la edición de Espartaco de Criterion se puede encontrar por nuestros lares (=Zona 2) en una edición de dos discos publicada por Universal.

P.S. 2: La sugerencia de David, (la comprobación del cheque previa a la pedorreta) hubiera estado bien. Aunque tambien es cierto que la impasibilidad keatoniana del oficinista hace lucir más su autodespido.

P.S. 3: Tanto Lubistch como Laughton se quedaron muy contentos de esta breve colaboración. Por desgracia, no volvieron a coincidir... *suspiro*

David said...

Cuánto taxista desperdiciado hay suelto por ahí.
Pues si a tu recomendación se une la de la Gloria, no me queda otra que ponerme con ella. Un saludo.

ANRO said...

Querida Gloria, ha sido todo un placer cinéfilo leer tus explicaciones, total y absolutamente necesarias, sobre este extraordinario segmento de la peli "If I Had a Million". Tal que descubrí la peli, pero sobre todo esa extraordinaria escena no dudé ni un segundo en hacer un post, con la absoluta certeza de que tú lo completarías, como así ha sido. Tanto los amigos, como yo mismo te agradecemos en lo que vale tu intervención.

Naturalmente el amigo David no tiene absolutamente ninguna excusa para ver esa extraordinaria peli.

Un abrazote para los dos y que paseis un buen fin de semana.

Ah¡ gracias por la información sobre "Espartaco".

abril en paris said...

Me he quedado de " pasta de boniato "
con el post, la peli y los comentarios tan documentadiiiisimoss.
Reconozco mi ignorancia humildemente
y desde luego aqui se aprende muchisimo.
El " toque Lubischt " ha marcado toda la filmografia de otros grandes como Wilder, que dijo del maestro " que era capaz de hacer más con una puerta cerrada de lo que la mayoria de los directores actuales son capaces de hacer con una cremallera abierta " ( lo de la cremallera lo he sustituido yo, la cita decia otra cosa )

Buscaremos la peli Antonio ¡ muchas gracias !

Me recuerda un poco el tema a una pelicula protagonizada por Gregory
Peck " El millonario " dirigida por un tal Ronald Neame sobre un guión de Jill Craigie ( basado en una novela de Mark Twain ).
De como el dinero cambia la vida y la actitud de la gente.

Un abrazo y felices obras !! :-))

FATHER_CAPRIO said...

Recuerdo la pareja destrozacoches y el asilo de ancianitas como los sketchs que mas me gustaron. La pedorreta laughtoniana me pareció predecible, (la esperaba desde que inició el trayecto), de todos modos me resulta curioso todo lo que estáis argumentando sobre los significados de los signos, que si un dedo, que si dos...
Menos mal que en cuestión de Laughton (actor para el que hace tiempo se me acabaron los adjetivos) tenemos a Gloria...

Intermitentemente, pero sigo estando aquí, porque como decía aquel... "Estamos tan a gustito"

Un abrazote

Gloria said...

Antonio, a mi lo que me hace gracia de la anécdota es imaginarme a Laughton y Lubistch trabajando en las tomas alternativas en las cuales el oficinista manda a tomar con viento fresco al Director General: haciendo la piruleta doble, el baile de punto de corner a la brasileña, el calvo estilo Charlestón, el "súbeteaquíybaila" o el corte de mangas con carrerilla, etc... y así durante unas horillas...

ANRO said...

Ja, ja, Abril, como díría aquel, todos los amigos haceis delicioso este rincón.
Gloria, que yo sepa, es experta en dos cuestiones: Charles Laughton, of course, y en Comics. Yo sabía cuando escribí el post que su intervención iba a ser crucial, como así ha sido´.
La peli está completa en You Tube, dale un vistazo y no te arrepentirás.
Un abrazote.

ANRO said...

Ya ves Father lo que tenemos por aquí. La escenas de los coches destrozados es genial, pero hay dos segmentos realmentes descacharrantes. El de la rebelion de las viejitas y el del empleado rompiendo lladrós a diestro y siniestro.
Ale, ale agustito todo el mundo¡
Un abrazote.

ANRO said...

Yo daría un año de mi vida, Gloria, por encontrarme, en un supuesto viaje en el tiempo, asitiendo al rodaje de la escena y ser testigo de las tomas falsas. ¡Todo un goce para los sentidos!....Siempre nos quedará la imaginación, amiga¡
Un abrazote.

Crowley said...

Jajajajajajajaja. Muy divertido, amigo Anro, muy divertido. Lo cierto es que antes de comentar nada y como ya sabes que el cine clásico no es mi ffuerte (vaya usted a sabaer qué lo es), he seguido tu recomendación y me la he visto en el youtube...
Sublime, maravillosa... Una gratísima película.
En cuanto a la escena... genial el detalle de las puertas que separan los diferentes estratos sociales y más genial aún la pedorreta... Yo no sé si en esas circunstancias haría algo peor jejeje
Un abrazo

ANRO said...

No te hagas el modesto Crowley. Un tío que controla tanto de cine tiene por fuerza que conocer el clásico. Me alegro que te hayas decidido a ver esta peli, porque tiene momentos muy divertidos. En algunos segmentos la peli no ha envejecido lo más mínimo.
Estoy en la labor de la quiniela. Espero ganarla.
Un abrazote.