Hace unos meses me prestaron una película titulada "This is Spinal Tap", de la que no había oído hablar. El amigo que me la prestó me dijo que iba de reportaje-gira de una banda de "heavy metal", pero que la peli no era tal documental y dicha banda no existía. Sin más información que la recomendación vehemente de mi amigo y la garantía de que el director de la cinta era el debut, como director, de Bob Reiner me dispuse a ver aquel extraño producto.El resultado fue una velada tan divertida como refrescante el descubrimiento de "This Is Spinal Tap", una película que ha pasado a engrasar la lista de las llamadas "películas de culto".
En el film se cuentan dos historias: las vicisitudes de la banda y la historia de lo que creen y piensan los miembros de la misma.
El "falso documental" se realizó en 1984 y creo que la película no llegó a las pantallas españolas. El propio director Bob Reiner interpreta a Marty DiBergi, el autor del reportaje, que ha seguido la primera gira americana en seis años de "Spinal Tap" .
Los componentes de la banda son, el líder DAvid St. Hubbins (Michael McKean), el bajista Derek Smalls(Harry Sheater) y Nigel Tufnel (Christopher Guest). Al igual que ocurrió en la banda de los Beatles cuando Yoko Ono se coló y empezó a trastocar la armonía, en Spinal Tap ocurre otro tanto de lo mismo cuando Jeanine Pettibone, novia de David St. Hubbins vuela desde Inglaterra para unirse a la gira.
El guión de tan fresco parece improvisado y escrito sobre la marcha (en parte fue así). Guest, McKean, Shearer y el propio Reiner escribieron también las canciones , si alguien las escucha que no espere gran cosa, aunque el disco gozó de cierta popularidad, en especial el tema "Sex Farm".
Anjélica Huston hace el papel de la escenógrafa Polly Deutsch, que realiza una rèplica de Stonehenge, que deberá descender sobre el escenario durante un gran número del espectáculo. Lo que ocurre da lugar a unas escenas descacharrantes.
"This Is Spinal Tap" es ejemplo de cine honesto, inteligente y divertido. Lo peor fue que los componentes de aquel grupo ficticio desearan pasar a la realidad. De hecho editaron algunos discos e hicieron algunas giras, pero al pasar a la nueva dimensión se quemaron y perdieron la inocencia.
2 comments:
¿No es ese Rob Reiner el que dirigió Todos los Hombre Buenos?
No le hacía capaz de esa especie de gamberrada-documental que, por lo que dices, debe resultar interesante.
Habrá que darle un vistazo.
Un abrazo.
Efectivamente, y no es que sea un director de la pera, pero aquí rebosa frescura por los cuatro costados.
De todas formas esta peli hay que verla en complicidad.
Algunos críticos americanos la colocaron por las nubes en su día...a mí me parece una exageración, no obstante es necesario verla y dejarse llevar por el goce vital.
Un abrazote.
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